Con dos extraordinarios conciertos, Especial Pre-Feria “Tributo Sinfónico al Pop-Rock” y el concierto tributo a Fito & Fitipaldis, se dio el pistoletazo de salida al programa de las fiestas argamasilleras.
Entre mascarillas, distancia social y responsabilidad, la ansiada normalidad poco a poco está volviendo al día a día, y para ello ha trabajado el Ayuntamiento de Argamasilla de Alba, y en concreto la Concejalía de Festejos, organizando una Feria y Fiestas 2021 en las que, teniendo presente que la COVID-19 sigue entre nosotros, todos los argamasilleros y argamasilleras puedan disfrutar y desconectar, dentro de lo posible, de lo acontecido en el último año y medio.
Aunque oficialmente las fiestas argamasilleras inician el sábado por la noche, el pasado viernes ya tuvieron lugar dos grandes espectáculos, el Concierto Especial Pre-Feria “Tributo Sinfónico al Pop-Rock” a cargo de la Agrupación Musical “Maestro Martín Díaz” junto a tres voces locales y un concierto tributo a Fito & Fitipaldis, los cuales tuvieron una gran acogida y presencia de público.
Abrió los espectáculos nocturnos de la Feria y Fiestas 2021, en el Auditorio de Verano, el Concierto Especial Pre-Feria “Tributo Sinfónico al Pop-Rock con un gran espectáculo musical donde se pudieron escuchar entre otros temas: “un mix de la reina de la movida madrileña, Alaska”, ‘El sol no regresa’ de la 5ª Estación y ‘The Show Must Go On’ de Queen gracias a Anaís Villegas Ordóñez; ‘Días de verano’ de Amaral, ‘Hoy tengo ganas de ti’ de Miguel Gallardo y ‘Rolling in the deep’ de Adele a través de la voz de Eva Pardo Gutiérrez, y ‘El Rey del glam’ de Loquillo, ‘Cien gaviotas’ de Duncan Dhu o ‘Camino a Soria’ y ‘¡Caray!’ de Gabinete Caligari por Paco Lanzarote.
En esta noche de tributos, finalizado el concierto Pre-Feria, en la Carpa de Verano y de la mano de la Diputación de Ciudad Real, el Ayuntamiento de Argamasilla de Alba organizó, para los amantes del rock, el concierto ‘Corazón Oxidado. Tributo Fito & Fitipaldis’, un tributo con raíces mayoritariamente manchegas que no dejo indiferente a ninguno de los presentes, los cuales saborearon cada uno de los conocidos temas del grupo como si estuvieran ante el propio Fito y los Fitipaldis.
Saxofón, guitarra, bajo, batería, teclados y por supuesto guitarra y voz ofrecieron un extraordinario concierto que estuvo a la altura de la banda original.